Blog

III Encuentro con Productores – Garagart

Todavía tenemos fresco el buen sabor de boca que nos dejó la visita de Iñaki de Garagart el viernes pasado.

Teníamos muchas ganas de inaugurar la nueva temporada de actividades y catas en la tienda y fue una gozada empezar con una visita tan especial.

Las cervezas de Garagart fueron de los primeros fichajes que hicimos para la tienda cuando empezamos a llenar las baldas y las Gorritxos siempre han ocupado un lugar especial en éste proyecto.

La tarde tenía buena pinta, hacía buen tiempo y a las 19:30 ya estábamos todos con los gaznates secos dispuestos a disfrutar de los finos caldos que Iñaki traía bajo el brazo.

Tras una breve presentación en la que Iñaki nos contó el viaje que han hecho él y su hermano desde alquimistas de cerveza casera hasta elaboradores de lotes de 2400 litros pasamos a lo que nos había llevado allí…

La primera en salir de la nevera fue la Gary & Esti, una Honey Wit de estilo belga diseñada para disfrutar de los rigores del verano que nos ayudó a apagar la sed inicial. Elaborada con trigo sin maltear alavés proveniente de una cooperativa cercana y miel guipuzcoana con Eusko Label, la Gary & Esti es una cerveza ligera y refrescante con aromas divertidos. De color pajizo y espuma generosa, conforme va bajando en la copa nos va ofreciendo pistas de los ingredientes extra que los hermanos Onaindia añaden a la receta: Cilantro, piel de naranja, manzanilla… Un festival de frescura que hizo que la Honey Wit de Garagart desapareciera de las copas en un suspiro. Había ganas de disfrutar y el 5,8% de alcohol y los suaves lúpulos americanos (Citra, Centennial y Sorachi) lo ponían fácil. Nos quedaban otras tres, así que había que echar algo al estómago y para la primera habíamos elegido un pintxo de yema de espárrago con mahonesa al pesto. Ligero y fresco, como la Gary & Esti.

La siguiente en llegar a las copas fue la Uzta, una Hoppy Farmhouse Ale inspirada en las Saison tradicionales de las granjas de Valonia (Sur de Bélgica). Especiada y alegre, ésta cerveza de 6,8% de alcohol subía un poco el listón de sabor, potencia y amargor. Aromática y peculiar, la Uzta responde a lo que se espera del estilo: Ligera acidez gracias a la levadura, sabores especiados refrescantes, aromas intensos y cuerpo ligero. Gran cerveza que como nos explicó Iñaki pretende emular a las que elaboraban los granjeros para consumir en verano cuando el agua potable era más escasa. Este estilo suele despertar opiniones diversas, da la impresión de que es de esos estilos que o gustan mucho o no hacen mucha gracia, pero en éste caso la opinión general fue muy positiva. Como era la segunda y última cerveza de inspiración belga que íbamos a tomar antes de saltar el Canal de la Mancha hacia terrenos británicos acompañamos la Uzta con Queso de Chimay y un pintxo de chorizos a la Duchese de Bourgogne (experimento que repetiremos).

Para entonces el volumen de la conversación ya había subido un par de puntos e Iñaki nos confesó uno de sus pecadillos. En todas las cervezas que elaboran aparecen todos los ingredientes que utilizan de manera específica, detallan las maltas, los lúpulos, los añadidos extras… peeeero se callan la levadura que utilizan, lo intentamos pero no hubo manera de que nos chivara cómo las eligen. En fin, nos quedamos con las ganas de saberlo y con la frase de que “En Garagart no hay secretos, pero la levadura no se dice”.

Ya habíamos saltado el Canal de la Mancha y la Gorritxo llegaba a las copas. La primera receta de Garagart es una Amber Ale elaborada con 5 maltas (Pale Malt, Munich, Melanoidin, Caraamber, Special B), copos de avena y 3 lúpulos americanos (Amarillo, Cascade y Citra) que cambiaba el registro de sabores por completo. Maltas tostadas, caramelo, toffe, amargor más elevado, torrefactos… La Gorritxo nos invitaba a un trago más relajado a pesar de su suavidad. Cerveza de carácter ingles con lúpulos americanos que nos ofreció un beber más relajado que aprovechamos para cotillear con Iñaki sobre las técnicas que utilizan y hablar de la filosofía de Garagart.

Mientras comíamos un pintxo de estofado de ternera a la Porter Iñaki nos explicó que su idea es hacer cervezas con matices que resulten agradables a todos los paladares, que siguen ajustando las recetas probando con diferentes azúcares para generar el gas, tiempos del dry hopping… Un gustazo para los que hacemos cerveza en casa y muchas veces nos toca experimentar a ojo.

La tarde avanzaba y llegaba el turno de la IPA del día. La Hopster Party avisaba en la etiqueta de lo que teníamos delante. Los dantzaris hispters con cabeza de lúpulo daban a entender que el amargor iba a subir bastante. Nos encontramos ante una IPA fresca y equilibrada con un amargor refrescante que no duerme el paladar como en otras IPAs. Los lúpulos americanos que utilizan (Centennial, Chinook, Simcoe y Mosaic) respetan la base de maltas Pale y Munich consiguiendo un equilibrio refrescante que ayudó a que nos termináramos las copas rapidillo. Aromas frutales y sabores cítricos cerraron una tarde de cerveza alavesa elaborada con cariño, ilusión y compromiso con la cerveza de calidad.

A las 21:30 Iñaki se montaba en la furgo y ponía rumbo a Gasteiz dejándonos con un buen sabor de boca y la alegría de haber disfrutado de una gran tarde de cerveza artesana.